Talált 473 Eredmények: jacob y la bendición

  • Raquel, viendo que no daba hijos a Jacob, se puso envidiosa de su hermana y dijo a Jacob: «Dame hijos, porque si no, me muero.» (Génesis 30, 1)

  • Entonces Jacob se enojó con Raquel y le dijo: «Si Dios te ha negado los hijos, ¿qué puedo hacer yo?» (Génesis 30, 2)

  • Le dio, pues, a su esclava Bilá, y Jacob se unió a ella. (Génesis 30, 4)

  • Bilá quedó embarazada, y dio a Jacob un hijo. (Génesis 30, 5)

  • Otra vez concibió Bilá, la esclava de Raquel, y dio a Jacob un segundo hijo. (Génesis 30, 7)

  • Viendo Lía que había dejado de tener hijos, tomó a su sierva Zelfa y se la dio por mujer a Jacob. (Génesis 30, 9)

  • Y Zelfa, esclava de Lía, dio un hijo a Jacob. (Génesis 30, 10)

  • Zelfa, la sierva de Lía, dio un segundo hijo a Jacob, (Génesis 30, 12)

  • Cuando por la tarde llegaba Jacob del campo, Lía salió a su encuentro y le dijo: «Esta noche dormirás conmigo, pues te he alquilado por unas manzanas de mi hijo.» (Génesis 30, 16)

  • Aquella noche, pues, durmió Jacob con ella. Dios escuchó las oraciones de Lía, la que concibió y le dio a Jacob el quinto hijo. (Génesis 30, 17)

  • De nuevo Lía quedó embarazada, y dio a Jacob el sexto hijo. (Génesis 30, 19)

  • Después de que Raquel hubo dado a luz a José, Jacob dijo a Labán: «Déjame regresar a mi patria y mi tierra. (Génesis 30, 25)


“Todas as percepções humanas, de onde quer que venham, incluem o bem e o mal. É necessário saber determinar e assimilar todo o bem e oferecê-lo a Deus, e eliminar todo o mal.” São Padre Pio de Pietrelcina