Talált 238 Eredmények: libro abierto
El hombre contestó: «Esto es lo extraño: él me ha abierto los ojos y ustedes no entienden de dónde viene. (Evangelio según San Juan 9, 30)
Jamás se ha oído decir que alguien haya abierto los ojos de un ciego de nacimiento. (Evangelio según San Juan 9, 32)
Muchas otras señales milagrosas hizo Jesús en presencia de sus discípulos que no están escritas en este libro. (Evangelio según San Juan 20, 30)
En mi primer libro, querido Teófilo, hablé de todo lo que Jesús comenzó a hacer y enseñar. (Hecho de los Apóstoles 1, 1)
Al final del libro, Jesús, lleno del Espíritu Santo, daba instrucciones a los apóstoles que había elegido y era llevado al cielo. (Hecho de los Apóstoles 1, 2)
Esto estaba escrito en el libro de los Salmos: Que su morada quede desierta y que nadie habite en ella. Pero también está escrito: Que otro ocupe su cargo. (Hecho de los Apóstoles 1, 20)
Pero Dios lo libró de los dolores de la muerte y lo resucitó, pues no era posible que quedase bajo el poder de la muerte. (Hecho de los Apóstoles 2, 24)
y lo libró de todas sus tribulaciones; le concedió sabiduría y lo hizo grato a los ojos de Faraón, rey de Egipto, quien lo nombró gobernador de Egipto y de toda su casa. (Hecho de los Apóstoles 7, 10)
Entonces Dios se apartó de ellos y dejó que adoraran a los astros del cielo, como está escrito en el Libro de los Profetas: "¿Acaso me ofrecieron ustedes víctimas y sacrificios durante cuarenta años en el desierto? (Hecho de los Apóstoles 7, 42)
Vio el cielo abierto y algo que descendía del cielo: era como una tienda de campaña grande, cuyas cuatro puntas venían a posarse sobre el suelo. (Hecho de los Apóstoles 10, 11)
que estaba con el gobernador Sergio Paulo, el cual era un hombre muy abierto. Este hizo llamar a Bernabé y Saulo, pues deseaba escuchar la Palabra de Dios, (Hecho de los Apóstoles 13, 7)
A su llegada reunieron a la Iglesia y les contaron todo lo que Dios había hecho por medio de ellos y cómo había abierto las puertas de la fe a los pueblos paganos. (Hecho de los Apóstoles 14, 27)