Talált 935 Eredmények: -Allí

  • Allí erigió un altar, y puso a ese lugar el nombre de Betel, porque allí se le había revelado Dios, cuando él huía de su hermano. (Génesis 35, 7)

  • Jacob llamó Betel a aquel lugar, porque allí Dios había hablado con él. (Génesis 35, 15)

  • Pero mientras tanto, unos negociantes madianitas pasaron por allí y retiraron a José de la cisterna. Luego lo vendieron a los ismaelitas por veinte monedas de planta, y José fue llevado a Egipto. (Génesis 37, 28)

  • Allí conoció a la hija de un cananeo llamado Súa, y después de tomarla por esposa, se unió con ella. (Génesis 38, 2)

  • Mucho tiempo después, murió la esposa de Judá, la hija de Súa. Una vez concluido el duelo, Judá se dirigió hacia Timná en compañía de su amigo Jirá, el adulamita, porque allí esquilaban sus ovejas. (Génesis 38, 12)

  • Entonces preguntó a la gente del lugar: "¿Dónde está esa prostituta que se sentaba en Enaim, al borde del camino?". Ellos le respondieron: "Allí nunca hubo una prostituta". (Génesis 38, 21)

  • Él regresó y dijo a Judá: "No la pude encontrar. Además, la gente del lugar me aseguró que allí nunca hubo una prostituta". (Génesis 38, 22)

  • Cuando José fue llevado a Egipto, Putifar -un egipcio que era funcionario del Faraón, capitán de guardias- lo compró a los ismaelitas que lo habían llevado allí. (Génesis 39, 1)

  • Entonces ella lo tomó de la ropa y le insistió: "Acuéstate conmigo". Pero él huyó, dejando su manto en las manos de la mujer, y se alejó de allí. (Génesis 39, 12)

  • Este confió a José todos los presos que había en la cárcel, y él dirigía todo lo que allí se hacía. (Génesis 39, 22)

  • Luego añadió: "He oído que en Egipto venden cereales. Vayan allí y compren algo para nosotros. Así podremos sobrevivir y no moriremos". (Génesis 42, 2)

  • "El hombre que gobierna aquel país, le dijeron, nos habló duramente y nos acusó de haber entrado allí como espías. (Génesis 42, 30)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina