Talált 285 Eredmények: Ejércitos

  • ¿Y quién es ese Rey de la gloria? El Rey de la gloria es el Señor de los ejércitos. Pausa (Salmos 24, 10)

  • La palabra del Señor hizo el cielo, y el aliento de su boca, los ejércitos celestiales; (Salmos 33, 6)

  • aunque bramen y se agiten sus olas, y con su ímpetu sacudan las montañas. El Señor de los ejércitos está con nosotros, nuestro baluarte es el Dios de Jacob. Pausa (Salmos 46, 4)

  • El Señor de los ejércitos está con nosotros, nuestro baluarte es el Dios de Jacob. Pausa (Salmos 46, 8)

  • El Señor de los ejércitos está con nosotros, nuestro baluarte es el Dios de Jacob. Pausa (Salmos 46, 12)

  • Hemos visto lo que habíamos oído en la Ciudad de nuestro Dios, en la Ciudad del Señor de los ejércitos, que él afianzó para siempre. (Salmos 48, 9)

  • Señor de los ejércitos, Dios de Israel: levántate para castigar a las naciones, no tengas compasión de los traidores. Pausa (Salmos 59, 6)

  • "Huyen los reyes, huyen con sus ejércitos, y te repartes como botín los adornos de un palacio. (Salmos 68, 13)

  • ¡Restáuranos, Señor de los ejércitos, que brille tu rostro y seremos salvados! (Salmos 80, 4)

  • Señor de los ejércitos, ¿hasta cuándo durará tu enojo, a pesar de las súplicas de tu pueblo? (Salmos 80, 5)

  • ¡Restáuranos, Señor de los ejércitos, que brille tu rostro y seremos salvados! (Salmos 80, 8)

  • Vuélvete, Señor de los ejércitos, observa desde el cielo y mira: ven a visitar tu vid, (Salmos 80, 15)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina