Talált 692 Eredmények: cielo

  • Yo glorifico a mi Dios, el Rey del cielo, y mi alma proclama gozosamente su grandeza. (Tobías 13, 9)

  • Brillará una luz resplandeciente hasta los confines de la tierra; pueblos numerosos llegarán a ti desde lejos, y los habitantes de todos los extremos de la tierra vendrán hacia tu santo Nombre, con las manos llenas de ofrendas para el Rey del Cielo. Todas las generaciones manifestarán en ti su alegría, y el nombre de la Ciudad elegida permanecerá para siempre. (Tobías 13, 13)

  • porque Jerusalén será reconstruida, y también su Templo por todos los siglos! ¡Feliz de mí, si queda alguien de mi descendencia para ver tu gloria y celebrar al Rey del cielo! Las puertas de Jerusalén serán hechas de zafiro y esmeralda, y todos sus muros, de piedras preciosas; las torres de Jerusalén serán construidas de oro, y sus baluartes, de oro puro. Las calles de Jerusalén serán pavimentadas de rubíes y de piedras de Ofir; (Tobías 13, 17)

  • Ellos abandonaron el camino de sus padres y adoraron al Dios del cielo, al que habían reconocido como Dios. Entonces fueron expulsados de la presencia de sus dioses y se refugiaron en Mesopotamia, donde habitaron mucho tiempo. (Judit 5, 8)

  • "¡Señor, Dios del cielo!, mira su arrogancia y compadécete de la humillación de nuestra raza: vuelve en este día tu mirada a los que te están consagrados". (Judit 6, 19)

  • Los conjuramos por el cielo y por la tierra, y también por nuestro Dios y Señor de nuestros padres, que nos castiga por nuestros pecados y por las transgresiones de nuestros antepasados; hagan hoy mismo lo que les decimos". (Judit 7, 28)

  • ¡Sí, Dios de mi padre y Dios de la herencia de Israel, Soberano del cielo y de la tierra, Creador de las aguas y Rey de toda la creación: escucha mi plegaria! (Judit 9, 12)

  • ¡Por la vida de Nabucodonosor, rey de toda la tierra, y por el poder de él, que te envió para poner en orden a todos los vivientes! Gracias a ti, no sólo lo sirven los hombres, sino que también, gracias a tu fuerza, las fieras, el ganado y las aves del cielo vivirán sometidos a Nabucodonosor y a toda su dinastía. (Judit 11, 7)

  • porque soy piadosa y sirvo noche y día al Dios del cielo. En adelante permaneceré a tu lado, señor mío, pero cada noche saldré al valle, para orar a Dios, y cuando incurran en el pecado, él me lo hará saber. (Judit 11, 17)

  • Ozías, por su parte, dijo a Judit: "Que el Dios Altísimo te bendiga, hija mía, más que a todas las mujeres de la tierra; y bendito sea el Señor Dios, creador del cielo y de la tierra, que te ha guiado para cortar la cabeza del jefe de nuestros enemigos. (Judit 13, 18)

  • Porque tú has hecho el cielo y la tierra y todas las maravillas que hay bajo el cielo; (Ester 13, 10)

  • Todavía estaba hablando, cuando llegó otro y le dijo: "Cayó del cielo fuego de Dios, e hizo arder a las ovejas y a los servidores hasta consumirlos. Yo solo pude escapar para traerte la noticia". (Job 1, 16)


“Nunca vá se deitar sem antes examinar a sua consciência sobre o dia que passou. Enderece todos os seus pensamentos a Deus, consagre-lhe todo o seu ser e também todos os seus irmãos. Ofereça à glória de Deus o repouso que você vai iniciar e não esqueça do seu Anjo da Guarda que está sempre com você.” São Padre Pio de Pietrelcina