Talált 27 Eredmények: convertiré

  • Por eso, así habla el Señor: Ustedes no me han escuchado, proclamando cada uno la liberación de su hermano y de su prójimo. Ahora, yo proclamo para ustedes una liberación -oráculo del Señor-: los dejo librados a la espada, a la peste y al hambre, y los convertiré en un motivo de horror para todos los reyes de la tierra. (Jeremías 34, 17)

  • Yo daré una orden -oráculo del Señor- y los haré volver hacia esta ciudad: combatirán contra ella, la tomarán y la incendiarán. Y a las ciudades de Judá las convertiré en un país desolado y sin habitantes. (Jeremías 34, 22)

  • Te convertiré en ruinas y en oprobio entre las naciones que te rodean, a los ojos de todos los que pasen. (Ezequiel 5, 14)

  • Pusieron su orgullo en la hermosura de sus joyas e hicieron con ellas las imágenes abominables de sus ídolos. Por eso las convertiré en inmundicia: (Ezequiel 7, 20)

  • Convertiré a Rabá en un pastizal de camellos y a las ciudades de los amonitas en un corral de ovejas: así ustedes sabrán que yo soy el Señor. (Ezequiel 25, 5)

  • por eso, así habla el Señor: Yo extiendo mi mano contra Edóm; exterminaré de él a hombres y animales, y lo convertiré en una ruina. Desde Temán hasta Dedán, todos caerán bajo la espada. (Ezequiel 25, 13)

  • Destruirán las murallas de Tiro y derribarán sus torres. Barreré de ella hasta el polvo y la convertiré en una roca desnuda. (Ezequiel 26, 4)

  • Te convertiré en una roca desnuda, en un lugar para secar las redes. No volverás a ser edificada, porque yo, el Señor, he hablado -oráculo del Señor-. (Ezequiel 26, 14)

  • Convertiré en tierra seca los canales del Nilo y venderé el país a gente malvada. Devastaré el país y todo lo que hay en él por manos de extranjeros. Yo, el Señor, he hablado. (Ezequiel 30, 12)

  • Tú le dirás: Así habla el Señor: ¡Aquí estoy contra ti, montaña de Seír! Yo extenderé mi mano contra ti y te convertiré en un desierto desolado. (Ezequiel 35, 3)

  • por eso, juro por mi vida -oráculo del Señor-: Te convertiré en sangre y la sangre te perseguirá. ¡Te has hecho reo de sangre y la sangre te perseguirá! (Ezequiel 35, 6)

  • Te convertiré en una desolación eterna y tus ciudades no volverán a ser habitadas. Así ustedes sabrán que yo soy el Señor. (Ezequiel 35, 9)


“Mesmo a menor transgressão às leis de Deus será levada em conta.” São Padre Pio de Pietrelcina