Talált 27 Eredmények: desastre

  • Se anuncia un desastre tras otro, porque está devastado todo el país: mis carpas fueron devastadas de repente, mis pabellones, en un instante. (Jeremías 4, 20)

  • ¡Busquen un refugio, benjaminitas, fuera de Jerusalén! ¡Toquen la trompeta en Técoa, levanten una señal en Bet Haquérem! Porque desde el Norte amenaza una desgracia y un gran desastre. (Jeremías 6, 1)

  • Estoy abrumado por el desastre de la hija de mi pueblo, estoy ensombrecido, la consternación se apoderó de mí. (Jeremías 8, 21)

  • ¡Ay de mí, a causa de mi desastre! ¡Mi llaga es incurable! Y eso que yo decía: "Es mi sufrimiento, lo soportaré". (Jeremías 10, 19)

  • Oigan el clamor de Joronaim: ¡devastación y desastre total! (Jeremías 48, 3)

  • Sí, por la cuesta de Lujit la gente sube llorando; sí, por la pendiente de Joronaim se oye un grito: "¡Desastre!". (Jeremías 48, 5)

  • ¡Hay ruido de guerra en el país y un desastre total! (Jeremías 50, 22)

  • Mis ojos se deshacen en llanto, me hierven las entrañas; mi bilis se derrama en la tierra por el desastre de la hija de mi pueblo, mientras desfallecen sus niños y pequeños en las plazas de la ciudad. (Lamentaciones 2, 11)

  • ¿A quién podré compararte? ¿A quién te asemejaré, hija de Jerusalén? ¿A quién te igualaré, para poder consolarte, virgen hija de Jerusalén? Porque tu desastre es inmenso como el mar: ¿quién te sanará? (Lamentaciones 2, 13)

  • Nos asaltan el terror y la fosa, la ruina y el desastre. (Lamentaciones 3, 47)

  • Ríos de lágrimas brotan de mis ojos, por el desastre de la hija de mi pueblo. (Lamentaciones 3, 48)

  • Las mismas manos de tiernas mujeres cocinaron a sus hijos: ellos les sirvieron de alimento en el desastre de la hija de mi pueblo. (Lamentaciones 4, 10)


“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina