Talált 357 Eredmények: lista de reyes

  • Entronizaron reyes, pero sin contar conmigo; designaron príncipes, pero sin mi aprobación. Se hicieron ídolos con su plata y su oro, para su propio exterminio. (Oseas 8, 4)

  • Palabra del Señor que llegó a Miqueas de Moréset, en tiempos de Jotám, Ajaz y Ezequías, reyes de Judá. Esto es lo que él vio acerca de Samaría y Jerusalén. (Miqueas 1, 1)

  • Por eso serás entregada como dote junto con Moréset Gat. Bet Aczib será una decepción para los reyes de Israel. (Miqueas 1, 14)

  • Él se burla de los reyes, los soberanos son un juguete para él, juega con las ciudades fortificadas, levanta un terraplén y las conquista. (Habacuc 1, 10)

  • A causa de mí, serán llevados ante gobernadores y reyes, para dar testimonio delante de ellos y de los paganos. (Mateo 10, 18)

  • ¿Qué fueron a ver? ¿Un hombre vestido con refinamiento? Los que se visten de esa manera viven en los palacios de los reyes. (Mateo 11, 8)

  • «Sí, lo paga», respondió. Cuando Pedro llegó a la casa, Jesús se adelantó a preguntarle: «¿Qué te parece, Simón? ¿De quiénes perciben los impuestos y las tasas los reyes de la tierra, de sus hijos o de los extraños?». (Mateo 17, 25)

  • Estén atentos: los entregarán a los tribunales y los azotarán en las sinagogas, y por mi causa serán llevados ante gobernadores y reyes, para dar testimonio delante de ellos. (Marcos 13, 9)

  • ¿Qué salieron a ver? ¿Un hombre vestido con refinamiento? Los que llevan suntuosas vestiduras y viven en la opulencia, están en los palacios de los reyes. (Lucas 7, 25)

  • ¡Les aseguro que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que ustedes ven y no lo vieron, oír lo que ustedes oyen y no lo oyeron!». (Lucas 10, 24)

  • Pero antes de todo eso, los detendrán, los perseguirán, los entregarán a las sinagogas y serán encarcelados; los llevarán ante reyes y gobernadores a causa de mi Nombre, (Lucas 21, 12)

  • Jesús les dijo: «Los reyes de las naciones dominan sobre ellas, y los que ejercen el poder sobre el pueblo se hacen llamar bienhechores. (Lucas 22, 25)


“O amor e o temor devem sempre andar juntos. O temor sem amor torna-se covardia. São Padre Pio de Pietrelcina