Talált 58 Eredmények: nueva criatura

  • Porque así como permanecen delante de mí el cielo nuevo y la tierra nueva que yo haré -oráculo del Señor-, así permanecerán la raza y el nombre de ustedes. (Isaías 66, 22)

  • De luna nueva en luna nueva, y de sábado en sábado, todos vendrán a postrarse delante de mí, dice el Señor. (Isaías 66, 23)

  • Al enterarse de esto, los jefes de Judá subieron de la casa del rey a la Casa del Señor, y se sentaron para el juicio a la entrada de la puerta Nueva de la Casa del Señor. (Jeremías 26, 10)

  • Llegarán los días -oráculo del Señor- en que estableceré una nueva Alianza con la casa de Israel y la casa de Judá. (Jeremías 31, 31)

  • Entonces Baruc leyó en el rollo las palabras de Jeremías, en la Casa del Señor, en la sala de Guemarías, hijo de Safán, el secretario, en el atrio superior, a la entrada de la puerta Nueva de la Casa del Señor ; y lo hizo en presencia de todo el pueblo. (Jeremías 36, 10)

  • Pero el príncipe se encargará de los holocaustos, la oblación y la libación, en las fiestas, los días de luna nueva, los sábados y todas las solemnidades del pueblo de Israel. Él proveerá lo necesario para el sacrificio por el pecado, para la oblación, el holocausto y los sacrificios de comunión, a fin de expiar por el pueblo de Israel. (Ezequiel 45, 17)

  • Así habla el Señor: la puerta del atrio interior que mira hacia el este, permanecerá cerrada durante los seis días laborables, pero se la abrirá el día sábado. También se la abrirá el día de la luna nueva. (Ezequiel 46, 1)

  • También la gente del pueblo se postrará a la entrada de esta puerta, delante del Señor, los sábados y los días de luna nueva. (Ezequiel 46, 3)

  • El día de la luna nueva, en cambio, presentará un ternero sin defecto, seis corderos y un carnero sin defecto. (Ezequiel 46, 6)

  • Han traicionado al Señor, porque engendraron bastardos: ahora la luna nueva los va a devorar, a ellos junto con sus campos. (Oseas 5, 7)

  • Yo los atraía con lazos humanos, con ataduras de amor; era para ellos como los que alzan a una criatura contra sus mejillas, me inclinaba hacia él y le daba de comer. (Oseas 11, 4)

  • Aquel día -oráculo del Señor- se oirá un clamor desde la puerta de los Peces, un alarido desde la Ciudad nueva y un gran estruendo desde las colinas. (Sofonías 1, 10)


“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina