Talált 922 Eredmények: Ciudad de Silo
Iban todos a empadronarse, cada uno a su ciudad. (Lucas 2, 3)
Subió también José desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, por ser él de la casa y familia de David, (Lucas 2, 4)
os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un salvador, que es el Cristo Señor; (Lucas 2, 11)
Así que cumplieron todas las cosas según la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. (Lucas 2, 39)
y, levantándose, le arrojaron fuera de la ciudad, y le llevaron a una altura escarpada del monte sobre el cual estaba edificada su ciudad, para despeñarle. (Lucas 4, 29)
Bajó a Cafarnaúm, ciudad de Galilea, y los sábados les enseñaba. (Lucas 4, 31)
Y sucedió que, estando en una ciudad, se presentó un hombre cubierto de lepra que, al ver a Jesús, se echó rostro en tierra, y le rogó diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme.» (Lucas 5, 12)
Y sucedió que a continuación se fue a una ciudad llamada Naím, e iban con él sus discípulos y una gran muchedumbre. (Lucas 7, 11)
Cuando se acercaba a la puerta de la ciuadad, sacaban a enterrar a un muerto, hijo único de su madre, que era viuda, a la que acompañaba mucha gente de la ciudad. (Lucas 7, 12)
Había en la ciudad una mujer pecadora pública, quien al saber que estaba comiendo en casa del fariseo, llevó un frasco de alabastro de perfume, (Lucas 7, 37)
Al saltar a tierra, vino de la ciudad a su encuentro un hombre, poseído por los demonios, y que hacía mucho tiempo que no llevaba vestido, ni moraba en una casa, sino en los sepulcros. (Lucas 8, 27)
Viendo los porqueros lo que había pasado, huyeron y lo contaron por la ciudad y por las aldeas. (Lucas 8, 34)