Talált 61 Eredmények: Criado

  • Dijo Abram: «He aquí que no me has dado descendencia, y un criado de mi casa me va a heredar.» (Génesis 15, 3)

  • No obstante, si temes bajar, baja al campamento con tu criado Purá, (Jueces 7, 10)

  • y escucha lo que dicen. Se fortalecerá tu mano con ello y luego bajarás a atacar al campamento. Bajó, pues, con su criado Purá hasta la extremidad de las avanzadillas del campamento. (Jueces 7, 11)

  • Su marido se puso en camino y fue donde ella, para hablarle al corazón y hacerla volver; llevaba consigo a su criado y un par de asnos. Cuando llegó a casa del padre de ella, le vio el padre de la joven y salió contento a su encuentro. (Jueces 19, 3)

  • Pero el hombre no quiso pasar la noche allí; se levantó, partió y llegó frente a Jebús, o sea, Jerusalén. Llevaba consigo los dos asnos cargados, su concubina y su criado. (Jueces 19, 10)

  • Cuando llegaban cerca de Jebús, era ya hora muy avanzada. El criado dijo a su amo: «Vamos, dejemos el camino y entremos en esa ciudad de los jebuseos para pasar allí la noche.» (Jueces 19, 11)

  • Y añadió a su criado: «Vamos a acercarnos a uno de esos poblados; pasaremos la noche en Guibeá o Ramá.» (Jueces 19, 13)

  • Preguntó Booz al criado que estaba al frente de los segadores: «¿De quién es esta muchacha?» (Rut 2, 5)

  • El criado que estaba al frente de los segadores dijo: «Es la joven moabita que vino con Noemí de los campos de Moab. (Rut 2, 6)

  • ni las normas de los sacerdotes respecto del pueblo: cuando alguien ofrecía un sacrificio, venía el criado del sacerdote, mientras se estaba cociendo la carne, con el tenedor de tres dientes en la mano, (I Samuel 2, 13)

  • Incluso antes de que quemasen la grasa, venía el criado del sacerdote y decía al que sacrificaba: «Dame carne para asársela al sacerdote, no te aceptará carne hervida, sino solamente carne cruda.» (I Samuel 2, 15)

  • Cuando llegaron a la comarca de Suf, dijo Saúl a su criado que le acompañaba: «Vamos a volvernos, no sea que mi padre olvidando las asnas se inquiete por nosotros.» (I Samuel 9, 5)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina