Talált 637 Eredmények: Jacob bendice a Faraón

  • Llamad a Faraón, rey de Egipto: «Ruido. - Dejó pasar la ocasión.» (Jeremías 46, 17)

  • Dice Yahveh Sebaot, el Dios de Israel: He aquí que yo visito a Amón de No, a Faraón y a Egipto y a sus dioses y reyes, a Faraón y a los que confían en él, (Jeremías 46, 25)

  • Pero tú no temas, siervo mío Jacob, ni desmayes, Israel, pues mira que yo acudo a salvarte desde lejos y a tu linaje del país de su cautiverio; volverá Jacob, se sosegará y estará tranquilo, y no habrá quien le inquiete. (Jeremías 46, 27)

  • Tú no temas, siervo mío Jacob, - oráculo de Yahveh - que contigo estoy yo, pues acabaré con todas las naciones adonde te empujé, pero contigo no acabaré; aunque sí te corregiré como conviene, ya que impune no te dejaré. (Jeremías 46, 28)

  • Lo que fue dicho por Yahveh al profeta Jeremías sobre los filisteos, en vísperas de batir el Faraón a Gaza. (Jeremías 47, 1)

  • No es así la «Parte de Jacob», pues él es el plasmador del universo, y aquel cuy heredero es Israel; Yahveh Sebaot es su nombre. (Jeremías 51, 19)

  • Pe. Tiende Sión sus manos: ¡no hay quien la consuele! Ha mandado Yahveh contra Jacob sus adversarios por doquier; Jerusalén se ha hecho cosa impura en medio de ellos. (Lamentaciones 1, 17)

  • Bet. El Señor ha destruido sin piedad todas las moradas de Jacob; ha derruido, en su furor, las fortalezas de la hija de Judá; por tierra ha echado, ha profanado al reino y a sus príncipes. (Lamentaciones 2, 2)

  • Guímel. En el ardor de su cólera ha quebrado todo el vigor de Israel; ha echado atrás su diestra de frente al enemigo; ha prendido en Jacob como fuego llameante que devora a la redonda. (Lamentaciones 2, 3)

  • Yo les volveré a la tierra que bajo juramento prometí a sus padres, a Abraham, Isaac y Jacob, y tomarán posesión de ella. Los multiplicaré y ya no menguarán. (Baruc 2, 34)

  • El descubrió el camino entero de la ciencia, y se lo enseñó a su siervo Jacob, y a Israel su amado. (Baruc 3, 37)

  • Vuelve, Jacob y abrázala, camina hacia el esplendor bajo su luz. (Baruc 4, 2)


“O amor tudo esquece, tudo perdoa, sem reservas.” São Padre Pio de Pietrelcina