Talált 306 Eredmények: Monte Sinaí

  • Aquel día no tendrás ya que avergonzarte de todos los delitos que cometiste contra mí, porque entonces quitaré yo de tu seno a tus alegres orgullosos, y no volverás a engreírte en mi santo monte. (Sofonías 3, 11)

  • ¿Quién eres tú, gran monte? Ante Zorobabel serás una explanada, y él extraerá la piedra de remate, a los gritos de «¡Bravo, bravo por ella!». (Zacarías 4, 7)

  • Así dice Yahveh: Me he vuelto a Sión, y en medio de Jerusalén habito. Jerusalén se llamará Ciudadde-Fidelidad, y el monte de Yahveh Sebaot, Montede-Santidad. (Zacarías 8, 3)

  • Se plantarán sus pies aquel día en el monte de los Olivos que está enfrente de Jerusalén, al oriente, y el monte de los Olivos se hendirá por el medio de oriente a occidente haciéndose un enorme valle: la mitad del monte se retirará al norte y la otra mitad al sur. (Zacarías 14, 4)

  • Todavía le lleva consigo el diablo a un monte muy alto, le muestra todos los reinos del mundo y su gloria, (Mateo 4, 8)

  • Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. (Mateo 5, 1)

  • «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte. (Mateo 5, 14)

  • Cuando bajó del monte, fue siguiéndole una gran muchedumbre. (Mateo 8, 1)

  • Después de despedir a la gente, subió al monte a solas para orar; al atardecer estaba solo allí. (Mateo 14, 23)

  • Pasando de allí Jesús vino junto al mar de Galilea; subió al monte y se sentó allí. (Mateo 15, 29)

  • Seis días después, toma Jesús consigo a Pedro, a Santiago y a su hermano Juan, y los lleva aparte, a un monte alto. (Mateo 17, 1)

  • Y cuando bajaban del monte, Jesús les ordenó: «No contéis a nadie la visión hasta que el Hijo del hombre haya resucitado de entre los muertos.» (Mateo 17, 9)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina