Talált 49 Eredmények: Salida

  • Hicieron una salida a mediodía, mientras Ben Hadad estaba bebiendo hasta la imbriaguez en sus tiendas con los 32 reyes auxiliares. (I Reyes 20, 16)

  • En el arca no había nada más que las dos tablas que hizo poner Moisés en ella, en el Horeb, cuando Yahveh hizo alianza con los israelitas a su salida de Egipto. (II Crónicas 5, 10)

  • Este mismo Ezequías cegó la salida superior de las aguas del Guijón y las condujo, bajo tierra, a la parte occidental de la Ciudad de David. Ezequías triunfó en todas sus empresas; (II Crónicas 32, 30)

  • Había dispuesto para el día uno del primer mes su salida de Babilonia, y el día uno del quinto mes llegaba a Jerusalén. ¡La mano bondadosa de su Dios estaba con él! (Esdras 7, 9)

  • Las puertas se elevaban a setenta codos de altura, con una anchura de cuarenta codos, para permitir la salida de sus fuerzas y el desfile ordenado de la infantería. (Judit 1, 4)

  • y a la salida de la asamblea, Ozías le condujo a su propia casa y ofreció un banquete a los ancianos. Y estuvieron invocando la ayuda del Dios de Israel durante toda la noche. (Judit 6, 21)

  • Cuando clamo, respóndeme, oh Dios mi justiciero, en la angustia tú me abres salida; tenme piedad, escucha mi oración. (Salmos 4, 2)

  • A un extremo del cielo es su salida, y su órbita llega al otro extremo, sin que haya nada que a su ardor escape. (Salmos 19, 7)

  • Has alejado de mí a mis conocidos, me has hecho para ellos un horror, cerrado estoy y sin salida, (Salmos 88, 9)

  • Egipto se alegró de su salida, pues era presa del terror. (Salmos 105, 38)

  • ¡De la salida del sol hasta su ocaso, sea loado el nombre de Yahveh! (Salmos 113, 3)

  • nuestras bestias bien cargadas; no haya brecha ni salida, ni grito en nuestras plazas. (Salmos 144, 14)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina