Talált 24 Eredmények: historia antigua

  • Esta es la historia de Noé: Noé fue el varón más justo y cabal de su tiempo. Noé andaba con Dios. (Génesis 6, 9)

  • Esta es la historia de Isaac, hijo de Abraham: Abraham engendró a Isaac. (Génesis 25, 19)

  • En cuanto oyó Labán hablar de Jacob, el hijo de su hermana, corrió a su encuentro, le abrazó, le bezó y le llevó a su casa. Entonces él contó a Labán toda esta historia, (Génesis 29, 13)

  • Esta es la historia de Jacob. José tenía diecisiete años. Estaba de pastor de ovejas con sus hermanos - él, muchacho todavía, con los hijos de Bilhá y los de Zilpá, mujeres de su padre. Y José comunicó a su padre lo mal que se hablaba de ellos. (Génesis 37, 2)

  • Los hechos del rey David, de los primeros a los postreros, están escritos en la historia del vidente Samuel, en la historia del profeta Natán y en la historia del vidente Gad, (I Crónicas 29, 29)

  • Este es el plano sobre el que Salomón edificó la Casa de Dios: sesenta codos de longitud, en codos de medida antigua, y veinte codos de anchura. (II Crónicas 3, 3)

  • El resto de los hechos de Salomón, los primeros y los postreros, ¿no están escritos en la historia del profeta Natán, en la profecía de Ajías el silonita, y en las visiones de Yedó el vidente, sobre Jeroboam, hijo de Nebat? (II Crónicas 9, 29)

  • Los hechos de Roboam, los primeros y los postreros, ¿no están escritos en la historia del profeta Semaías y del vidente Iddó? Hubo guerra continua entre Roboam y Jeroboam. (II Crónicas 12, 15)

  • El resto de los hechos de Josafat, los primeros y los postreros, están escritos en la historia de Jehú, hijo de Jananí, que se halla inserta en el libro de los reyes de Israel. (II Crónicas 20, 34)

  • Historia de Tobit, hijo de Tobiel, hijo de Ananiel, hijo de Aduel, hijo de Gabael, del linaje de Asiel, de la tribu de Neftalí, (Tobías 1, 1)

  • Tobit salió al encuentro de su nuera hasta las puertas de Nínive, bendiciendo a Dios, lleno de gozo. Cuando los de Nínive le vieron caminar, avanzando con su antigua firmeza, sin necesidad de lazarillo, se maravillaron. Tobit proclamó delante de ellos que Dios se había compadecido de él y le había abierto los ojos. (Tobías 11, 16)

  • ¿Vas a seguir tú la ruta antigua que anduvieron los hombres perversos? (Job 22, 15)


“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina