Talált 37 Eredmények: majestad

  • gloria y majestad están ante él, poder y fulgor en su santuario. (Salmos 96, 6)

  • ¡Alma mía, bendice a Yahveh! ¡Yahveh, Dios mío, qué grande eres! Vestido de esplendor y majestad, (Salmos 104, 1)

  • He. Esplendor y majestad su obra, Vau. su justicia por siempre permanece. (Salmos 111, 3)

  • He. El esplendor, la gloria de tu majestad, el relato de tus maravillas, yo recitaré. (Salmos 145, 5)

  • Alaben el nombre de Yahveh: porque sólo su nombre es sublime, su majestad por encima de la tierra y el cielo. (Salmos 148, 13)

  • que de ningún modo se podía perjudicar a los que tenían puesta su confianza en la santidad del Lugar, y en la majestad inviolable de aquel Templo venerado en todo el mundo. (II Macabeos 3, 12)

  • Llevaba en su vestido talar el mundo entero, grabados en cuatro hileras de piedras los nombres gloriosos de los Padres y tu majestad en la diadema de su cabeza. (Sabiduría 18, 24)

  • El poder de su majestad, ¿quién lo calculará? ¿quién pretenderá contar sus misericordias? (Eclesiástico 18, 5)

  • Entra en la peña, húndete en el polvo, lejos de la presencia pavorosa de Yahveh y del esplendor de su majestad, cuando él se alce para hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 10)

  • Entrarán en las grietas de las peñas y en las hendiduras de la tierra, lejos de la presencia pavorosa de Yahveh y del esplendor de su majestad, cuando él se alce para hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 19)

  • y se meterá en los agujeros de las peñas y en las hendiduras de las piedras, lejos de la presencia pavorosa de Yahveh y del esplendor de su majestad, cuando él se alce para hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 21)

  • Así que tropezó Jerusalén, y Judá ha caído; pues sus lenguas y sus fechorías a Yahveh han llegado, irritando los ojos de su majestad. (Isaías 3, 8)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina