Talált 190 Eredmények: Caminos

  • Si guardas sus mandamientos y sigues sus caminos, el Señor, tu Dios, te consagrará como pueblo suyo, según te lo ha jurado, (Deuteronomio 28, 9)

  • El Señor hará que seas derrotado por tus enemigos; saldrás a su encuentro por un camino, y por siete caminos huirás y serás el espanto de todos los reinos de la tierra. (Deuteronomio 28, 25)

  • Si obedeces los mandamientos del Señor, tu Dios, que yo te prescribo hoy; si le amas, si sigues sus caminos, si guardas sus mandamientos, sus leyes y sus preceptos, vivirás y te multiplicarás y él te bendecirá en la tierra que vas a ocupar. (Deuteronomio 30, 16)

  • Él es la roca, sus obras son perfectas, todos sus caminos son la justicia misma; el Dios fiel, en él no hay maldad; es justo y recto. (Deuteronomio 32, 4)

  • Pero poned sumo empeño en cumplir los mandamientos y la ley que os mandó Moisés, siervo del Señor, en amar al Señor, vuestro Dios, seguir sus caminos, observar sus mandamientos, permanecer unidos a él y en servirlo con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma". (Josué 22, 5)

  • a fin de probar por su medio a Israel, para ver si sigue o no los caminos del Señor, como los siguieron sus padres". (Jueces 2, 22)

  • En los días de Sangar, hijo de Anat, en los días de Yael, los caminos estaban desiertos; los que andaban por los caminos, iban por senderos tortuosos. (Jueces 5, 6)

  • Los que montáis asnas blancas, sentados sobre tapices, y vosotros los que vais por los caminos: ¡Cantad! (Jueces 5, 10)

  • Los de Benjamín salieron a su encuentro, alejándose de la ciudad como las veces anteriores; mataron a unos treinta hombres por los caminos de Betel y de Gabaón. (Jueces 20, 31)

  • Pero sus hijos no siguieron sus caminos; se volvieron ambiciosos, se dejaban sobornar y dictaban sentencias injustas. (I Samuel 8, 3)

  • y le dijeron: "Tú eres ya viejo, y tus hijos no siguen tus caminos. Danos un rey para que nos gobierne, como tienen todas las naciones". (I Samuel 8, 5)

  • No deis la noticia en Gat, no lo publiquéis por los caminos de Ascalón; que no se alegren las hijas de los filisteos, que no se regocijen las hijas de los incircuncisos. (II Samuel 1, 20)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina