Talált 134 Eredmények: Set
Setenta semanas están fijadas sobre tu pueblo y tu ciudad santa, para poner fin al delito y a la injusticia, para perdonar los crímenes e instaurar una justicia eterna, para que se cumplan visión y profecía y para consagrar el lugar santísimo. (Daniel 9, 24)
Daniel dijo al rey: "Hágase como dices". Los sacerdotes de Bel eran setenta, sin contar mujeres e hijos. (Daniel 14, 9)
Yo la compré por quince monedas de plata y seiscientos setenta y cinco kilos de cebada. (Oseas 3, 2)
Palabra del Señor dirigida a Miqueas, de Moréset, en tiempo de Jotán, Acaz y Ezequías, reyes de Judá. Sus visiones sobre Samaría y Jerusalén. (Miqueas 1, 1)
Por eso habrás de renunciar a Moréset-Gat; Bet-Aczib será una desilusión para los reyes de Israel. (Miqueas 1, 14)
Entonces el ángel del Señor continuó: Señor todopoderoso, ¿cuándo te compadecerás de Jerusalén y de las ciudades de Judá, contra las cuales estás tan indignado hace ya setenta años? (Zacarías 1, 12)
Jesús le dijo: "No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete". (Mateo 18, 22)
de Enós, de Set, de Adán, de Dios. (Lucas 3, 38)
Después de esto, el Señor designó otros setenta y dos, y los envió delante de él, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde él pensaba ir. (Lucas 10, 1)
Los setenta y dos volvieron llenos de alegría, diciendo: "Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre". (Lucas 10, 17)
Entonces José mandó llamar a su padre Jacob y a toda la familia, compuesta de setenta y cinco personas. (Hechos 7, 14)
Después llamó a dos oficiales y les dijo: "A las nueve de la noche hay que salir para Cesarea. Preparad doscientos soldados de infantería, setenta de caballería y doscientos lanceros". (Hechos 23, 23)