Talált 351 Eredmények: boca

  • Por eso el Señor no tendrá compasión de sus jóvenes, no se apiadará de sus viudas ni de sus huérfanos; porque todos son malvados y perversos y toda boca habla locuras. Y con todo no ha amainado su cólera; su brazo aún está extendido. (Isaías 9, 16)

  • juzgará con justicia a los débiles, y con rectitud a los pobres del país; al tirano herirá con la vara de su boca, matará al criminal con el soplo de sus labios. (Isaías 11, 4)

  • Han salido en dirección a Egipto, sin haber consultado a mi boca, para refugiarse al amparo del Faraón y acogerse a la sombra de Egipto. (Isaías 30, 2)

  • Buscad en el libro del Señor y leed: no falta ni uno; ninguno echa de menos a su compañero, pues la boca del Señor lo ha ordenado y su soplo los ha reunido. (Isaías 34, 16)

  • La gloria del Señor se manifestará y todo mortal la verá, porque la boca del Señor ha hablado. (Isaías 40, 5)

  • Por mí mismo lo juro; de mi boca sale la verdad, una palabra irrevocable: Ante mí se doblará toda rodilla, toda lengua jurará por mí, (Isaías 45, 23)

  • Las cosas pasadas las anuncié yo mucho antes, de mi boca salieron y las proclamé; de pronto he actuado, y se han verificado. (Isaías 48, 3)

  • Hizo de mi boca una espada afilada, con la sombra de su mano me guardó; hizo de mí una flecha aguzada, en su aljaba me escondió. (Isaías 49, 2)

  • He puesto mis palabras en tu boca y te he ocultado con la sombra de mi mano, al desplegar los cielos y fundar la tierra y decir a Sión: "Mi pueblo res tú". (Isaías 51, 16)

  • muchos pueblos se llenarán de asombro; a su vista los reyes cerrarán la boca, porque verán un suceso no contado jamás y contemplarán algo inaudito. (Isaías 52, 15)

  • Era maltratado, y no se resistía ni abría su boca; como cordero llevado al matadero, como oveja ante sus esquiladores, no abría la boca. (Isaías 53, 7)

  • Se le preparó una tumba entre los criminales, en su muerte se le juntó con malhechores, siendo así que él jamás cometió injusticia ni hubo engaño en su boca. (Isaías 53, 9)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina