Talált 243 Eredmények: filisteos derrotados
Cuando los israelitas del valle vieron que habían huido y que Saúl con sus tres hijos habían muerto, abandonaron también ellos sus ciudades y se dieron a la fuga. Los filisteos vinieron y se establecieron en ellas. (I Crónicas 10, 7)
Al día siguiente los filisteos fueron a despojar a los caídos y encontraron a Saúl y sus hijos caídos en el monte Gelboé. (I Crónicas 10, 8)
Les despojaron de sus armas, les cortaron la cabeza e hicieron publicar la buena nueva por todo el país de los filisteos, a los cuatro vientos, a sus ídolos y al pueblo. (I Crónicas 10, 9)
Cuando los habitantes de Yabés Galaad supieron lo que los filisteos habían hecho con Saúl, (I Crónicas 10, 11)
Estaba con David en Pas Damín, cuando los filisteos se reunieron allí para la lucha. Había allí un campo plantado de cebada, y el ejército huía ya delante de los filisteos; (I Crónicas 11, 13)
pero él se puso en medio del campo, lo defendió y derrotó a los filisteos. El Señor alcanzó de nuevo una gran victoria. (I Crónicas 11, 14)
Tres de los treinta fueron a la roca de la cueva de Adulán, donde estaba David, mientras los filisteos estaban acampados en el valle de Refaín. (I Crónicas 11, 15)
David estaba en el refugio mientras los filisteos tenían una guarnición en Belén. (I Crónicas 11, 16)
También de la tribu de Manasés se unieron algunos a David cuando iba con los filisteos a luchar contra Saúl; pero no llegó a luchar contra él, pues los príncipes de los filisteos decidieron despedirle diciendo: "Se pasaría a Saúl, con peligro de nuestras cabezas". (I Crónicas 12, 20)
Cuando los filisteos supieron que David había sido ungido rey de todo Israel, fueron todos en su busca. David se enteró y les salió al encuentro. (I Crónicas 14, 8)
Los filisteos llegaron y se desplegaron por el valle de Refaín. (I Crónicas 14, 9)
David consultó a Dios: "¿Debo atacar a los filisteos? ¿Los pondrás en mis manos?". El Señor le respondió: "Atácalos, porque los pondré en tus manos". (I Crónicas 14, 10)