Talált 399 Eredmények: gloria
En aquel momento mi razón volvió a mí y, para gloria de mi reino, me fue devuelta mi majestad y mi esplendor. Mis consejeros y mis magnates vinieron a buscarme; se me restableció en mi reino y me fue dado un poder aún mayor. (Daniel 4, 33)
Oh rey, el Dios altísimo dio a tu padre Nabucodonosor el reino, el poder, la majestad y la gloria; (Daniel 5, 18)
Pero tan pronto como se ensoberbeció su corazón y su espíritu se obstinó en el orgullo, fue depuesto de su trono real y se le quitó su gloria. (Daniel 5, 20)
Se le dio poder, gloria e imperio, y todos los pueblos, naciones y lenguas le servían. Su poder era un poder eterno, que nunca pasará, y su reino no será destruido jamás. (Daniel 7, 14)
Cuantos más eran, más han pecado contra mí y han cambiado su gloria por la ignominia. (Oseas 4, 7)
Cuando terminan sus borracheras, comienzan sus prostituciones; cambian la gloria por la ignominia. (Oseas 4, 18)
La gloria de Efraín se va volando como un pájaro; no hay ya nacimiento, embarazo o concepción. (Oseas 9, 11)
Los habitantes de Samaría temen por el becerro de Bet-Avén; sí, su pueblo está de luto por él, y por él sus sacerdotes se lamentan porque su gloria ha desaparecido. (Oseas 10, 5)
También a vosotros os traeré un conquistador, habitantes de Maresá. Hasta Adulán llegará la gloria de Israel. (Miqueas 1, 15)
Pues la tierra se llenará del conocimiento de la gloria del Señor como las aguas llenan el mar. (Habacuc 2, 14)
¡Te has saciado de infamia, no de gloria! ¡Bebe tú también y muestra tu prepucio! A ti pasa la copa de la diestra del Señor, y después de la gloria viene la vergüenza. (Habacuc 2, 16)
Dios viene de Temán, el santo del monte Farán; su majestad cubre los cielos y de su gloria está llena la tierra. (Habacuc 3, 3)