Talált 42 Eredmények: habitar

  • Los jefes del pueblo se establecieron en Jerusalén. El resto del pueblo echó a suertes para que uno de cada diez viniese a habitar en Jerusalén, la ciudad santa, quedando los otros nueve en las ciudades. (Nehemías 11, 1)

  • Una cosa pido al Señor, sólo eso busco: habitar en la casa del Señor todos los días de mi vida para gustar la dulzura del Señor y contemplar la belleza de su templo. (Salmos 27, 4)

  • Confía en el Señor y haz el bien, para habitar en tu tierra y vivir tranquilo; (Salmos 37, 3)

  • Ojalá pueda habitar en tu tienda eternamente y encontrar refugio al abrigo de tus alas. (Salmos 61, 5)

  • Su salvación está cerca de sus fieles, su gloria va a habitar en nuestra tierra; (Salmos 85, 10)

  • ¡Ay de mí, que he tenido que emigrar a Mésec, y habitar en la tienda de Cedar! (Salmos 120, 5)

  • Mejor es habitar en un país desierto que con una mujer quisquillosa e iracunda. (Proverbios 21, 19)

  • De nuevo te dirán al oído tus hijos, que creías perdidos: Este lugar es muy estrecho para mí, hazme sitio donde pueda habitar. (Isaías 49, 20)

  • Así pues, Juan, hijo de Carej, y todos los oficiales tomaron consigo a todos los supervivientes de Judá que habían vuelto de todas las naciones donde estaban dispersos a habitar en la tierra de Judá: (Jeremías 43, 5)

  • Y dirás: ¡Señor! Tú mismo has sentenciado que este lugar será destruido y que nadie lo volverá a habitar; ni hombre, ni bestia, sino que será un perpetuo desierto. (Jeremías 51, 62)

  • Me ha hecho habitar en lugares tenebrosos, como los muertos de antaño. (Lamentaciones 3, 6)

  • te precipitaré con los que han bajado a la fosa, con las generaciones del pasado; te haré habitar en las profundidades de la tierra, en las soledades perpetuas, con los que yacen en la fosa, a fin de que no seas restablecida nunca en la tierra de los vivos. (Ezequiel 26, 20)


“Diante de Deus ajoelhe-se sempre.” São Padre Pio de Pietrelcina