Talált 108 Eredmények: herencia

  • Raquel y Lía le respondieron: "¿Tenemos acaso nosotras parte o herencia en la casa de nuestro padre? (Génesis 31, 14)

  • Los que engendres después de ellos serán tuyos, y recibirán la herencia en nombre de sus hermanos. (Génesis 48, 6)

  • y los podréis dejar en herencia a vuestros hijos, después de vosotros, para que los posean a título de propiedad perpetua como esclavos vuestros. En cuanto a vuestros hermanos, los israelitas, ninguno tratará con dureza a los demás. (Levítico 25, 46)

  • El Señor dijo a Aarón: "Te confío la guarda de mis ofrendas. Todas las cosas consagradas a mí por los israelitas os las asigno a ti y a tus hijos como herencia por estatuto eterno. (Números 18, 8)

  • El Señor dijo a Aarón: "Tú no tendrás herencia en su tierra, no habrá parte para ti en medio de ellos. Yo mismo seré tu herencia y tu parte en medio de los israelitas. (Números 18, 20)

  • Yo doy como herencia a los hijos de Leví todos los diezmos de Israel en compensación de los servicios que prestan en la tienda de la reunión. (Números 18, 21)

  • "Di a los levitas: Cuando recibáis de los israelitas los diezmos de sus bienes, que yo os doy por herencia, también vosotros presentaréis al Señor en ofrenda una décima parte de los diezmos, (Números 18, 26)

  • "Entre éstos se distribuirá la tierra como herencia, según el número de los inscritos. (Números 26, 53)

  • A los más numerosos les darás una porción mayor; a los menos numerosos, una parte más pequeña: a cada uno, su herencia según el número de hombres. (Números 26, 54)

  • la herencia de cada tribu se repartirá por suertes, teniendo en cuenta el número mayor y menor. (Números 26, 56)

  • Todos los varones registrados mayores de un mes fueron 23.000. No habían sido registrados entre los israelitas, pues no habían recibido herencia con ellos. (Números 26, 62)

  • "Las hijas de Selofjad tienen razón. Les darás, pues, una propiedad en herencia, como a los hermanos de su padre, y harás pasar a ellas la herencia de su padre. (Números 27, 7)


“Como Jesus, preparemo-nos a duas ascensões: uma ao Calvário e outra ao Céu. A ascensão ao Calvário, se não for alegre, deve ao menos ser resignada!” São Padre Pio de Pietrelcina