Talált 25 Eredmények: homicida

  • No aceptaréis rescate por la vida de un homicida reo de muerte: debe morir. (Números 35, 31)

  • donde pudiera encontrar refugio el homicida que hubiera matado involuntariamente a su prójimo sin haber existido enemistad previa entre ellos; refugiándose en una de estas ciudades, podrá salvar su vida: (Deuteronomio 4, 42)

  • Allanarás los caminos de acceso y dividirás en tres sectores el territorio que el Señor, tu Dios, te da en heredad, con el fin de que todo homicida pueda encontrar refugio en estas ciudades. (Deuteronomio 19, 3)

  • El homicida puede refugiarse allí y salvar su vida si mató a su prójimo sin querer, sin haber sido anteriormente enemigo suyo. (Deuteronomio 19, 4)

  • de lo contrario, el vengador del homicida lo perseguirá y, si el camino fuese largo, lo alcanzaría y le daría muerte. Y, sin embargo, ese hombre no merecía la muerte, pues nunca había odiado a su víctima. (Deuteronomio 19, 6)

  • en las que pueda refugiarse un homicida que haya matado a alguien involuntariamente y por inadvertencia, para que sirvan de refugio contra el vengador de sangre. (Josué 20, 3)

  • El homicida huirá a una de estas ciudades, se detendrá a la entrada de la puerta de la ciudad y expondrá su caso a los ancianos de la ciudad. Éstos lo recibirán y le asignarán una casa para que viva con ellos. (Josué 20, 4)

  • Se quedará en esa ciudad hasta que haya comparecido en juicio ante la comunidad, hasta la muerte del sumo sacerdote que esté en funciones en aquellos días. Entonces el homicida podrá marchar y entrar en su ciudad y en su casa, en la ciudad de donde había huido". (Josué 20, 6)

  • Éstas fueron las ciudades asignadas a todos los israelitas y al extranjero residente, para que se refugiara en ellas el homicida involuntario y no cayera en manos del vengador de sangre antes de haber comparecido ante la asamblea. (Josué 20, 9)

  • De esta forma pasó de esta vida aquel homicida y blasfemo, sufriendo tormentos atroces. Murió entre montes y en tierra extraña, con una muerte miserable. (II Macabeos 9, 28)

  • Vosotros sois hijos del diablo y queréis cumplir los deseos de vuestro padre. Él fue homicida desde el principio y no se mantuvo en la verdad, pues no hay verdad en él. Cuando dice mentira, habla según su propia naturaleza, porque es mentiroso y padre de la mentira. (Juan 8, 44)

  • Que ninguno de vosotros tenga que sufrir por ser homicida, ladrón, malhechor o por mezclarse en asuntos ajenos (I Pedro 4, 15)


“Que Nossa Senhora nos obtenha o amor à cruz, aos sofrimentos e às dores.” São Padre Pio de Pietrelcina