Talált 90 Eredmények: raza
No se afanarán en vano, ni engendrarán hijos destinados a la muerte, porque serán una raza bendita del Señor, y con ellos su estirpe. (Isaías 65, 23)
Porque, lo mismo que el cielo nuevo y la nueva tierra que yo creo subsisten ante mí -dice el Señor-, así subsistirán vuestra raza y vuestro nombre. (Isaías 66, 22)
Y será preferible la muerte a la vida para todos los supervivientes de esta raza perversa, en todos los lugares donde yo los arroje -dice el Señor todopoderoso-. (Jeremías 8, 3)
para que sepa toda la tierra que tú eres el Señor Dios nuestro y que tu nombre se invoca sobre Israel y sobre su raza. (Baruc 2, 15)
Escuchen o no escuchen -puesto que son una raza de rebeldes-, sabrán que en medio de ellos se encuentra un profeta. (Ezequiel 2, 5)
Y tú, hijo de hombre, no los temas ni tengas miedo de sus palabras. No temas, aunque te encuentres entre cardos y zarzas y habites en medio de escorpiones. No temas sus palabras ni te asustes de sus miradas, porque no son más que una raza de rebeldes. (Ezequiel 2, 6)
Les comunicarás mis palabras, escuchen o no, porque son una raza de rebeldes. (Ezequiel 2, 7)
Pero tú, hijo de hombre, escucha lo que te digo; no seas rebelde como esta raza de rebeldes; abre la boca y come lo que te doy". (Ezequiel 2, 8)
he hecho tu frente dura como el diamante, más dura que la roca. No los temas ni te asustes de ellos. Son una raza de rebeldes". (Ezequiel 3, 9)
Yo haré que tu lengua se te pegue al paladar; quedarás mudo y dejarás de ser su acusador, porque son una raza de rebeldes. (Ezequiel 3, 26)
Pero cuando yo te hable, abriré tu boca y les dirás: Así habla el Señor; quien quiera escuchar escuche, quien no quiera no escuche; porque son una raza de rebeldes". (Ezequiel 3, 27)
"Hijo de hombre, tú vives en medio de la raza de rebeldes. Tienen ojos para ver y no ven, oídos para oír y no oyen; son un pueblo de rebeldes. (Ezequiel 12, 2)