Deuteronomio, 25
19. Por eso, cuando el Señor, tu Dios, te libre definitivamente de todos los enemigos que están a tu alrededor, en la tierra que él te dará en herencia, borrarás de todas partes el recuerdo de Amalec. ¡No lo olvides!
19. Por eso, cuando el Señor, tu Dios, te libre definitivamente de todos los enemigos que están a tu alrededor, en la tierra que él te dará en herencia, borrarás de todas partes el recuerdo de Amalec. ¡No lo olvides!
“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina