22. Luego tomarás la grasa de este carnero: la grasa de la cola, la que cubre las entrañas, la protuberancia del hígado, los dos riñones y la grasa que está sobre ellos, y también la pata derecha, porque se trata del carnero ofrecido para la investidura de los sacerdotes.





O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina