10. y le dijo: «Hombre falso y lleno de maldad, hijo del demonio, enemigo de la justicia, ¿cuándo dejarás de torcer los rectos caminos del Señor?





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina