38. Cuando vieron el Santuario desolado, el altar profanado, las puertas completamente quemadas, las malezas crecidas en los atrios como en un bosque o en una montaña, y las salas destruidas,





“Enquanto tiver medo de ser infiel a Deus, você não será’. Deve-se ter medo quando o medo acaba!” São Padre Pio de Pietrelcina