22. En el momento en que ellos comenzaron las aclamaciones y las alabanzas, el Señor sembró la discordia entre los amonitas, los moabitas y los de las montañas de Seír que habían venido a invadir a Judá, y se batieron entre sí.





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina