2. Esto le produjo un gran temor, porque Gabaón era tan importante como una ciudad real y más grande aún que Ai. Además, todos sus habitantes eran aguerridos.





“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina