Proverbios, 6
30. ¿Acaso no se desprecia al ladrón, aunque robe para saciar su apetito cuando tiene hambre?
30. ¿Acaso no se desprecia al ladrón, aunque robe para saciar su apetito cuando tiene hambre?
“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina