Hebreos, 11

38. ¡hombres de los que no era digno el mundo!, errantes por desiertos y montañas, por cavernas y antros de la tierra.

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Hebreos 11 es conocido como el capítulo de Faith in the Bible, que presenta una lista de héroes de la fe del Antiguo Testamento y cómo confiaban en Dios en medio de las adversidades. Estos hombres y mujeres fueron considerados justos por su fe y, incluso sin ver las promesas de Dios en sus vidas, permanecieron firmes en su confianza en el Señor. Los siguientes son cinco versículos relacionados con los temas abordados en Hebreos 11:

Génesis 6:9: "Estas son las generaciones de Noé. Noé era un hombre justo y justo entre sus contemporáneos; Noé caminó con Dios". Este versículo presenta a Noé como un hombre justo y justo que caminó con Dios, lo que lo llevó a obedecer las órdenes del Señor a construir un arca y salvarse de la inundación. La fe de Noé en Dios lo ayudó a superar las dificultades y confiar en las promesas divinas.

Génesis 15:6: "Abram creía en el Señor, y eso fue acreditado a él como justicia". Este versículo a menudo se cita en Hebreos 11 para mostrar cómo Abraham estaba justificado por la fe en Dios. Incluso en su vejez, cuando la promesa de tener un hijo parecía imposible, Abraham creía en las promesas de Dios y fue considerada justa por su fe.

Génesis 22:17: "Te bendeciré y multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena en la playa del mar. Y tu descenso conquistará las ciudades de tus enemigos". Este versículo destaca la promesa de Dios a Abraham que su descendencia sería numerosa y conquistaría a sus enemigos. La fe de Abraham en esta promesa lo sostuvo en medio de las dificultades y desafíos que enfrentó.

Éxodo 2:10: "Cuando el niño creció, lo llevó a la hija de Faraón, y él se convirtió en su hijo. Ella lo llamó Moisés y dijo:" Porque lo sacé de las aguas ". Este versículo se refiere a la historia de Moisés, que se salvó de la muerte cuando su madre lo colocó en una canasta y lo colocó en el río Nilo. La fe de su madre en Dios la llevó a creer que él sería protegido y salvado, y que la fe fue recompensada cuando fue encontrado y adoptado por la hija de Faraón.

Joshua 6:20: "Entonces la gente dio un gran grito, y las paredes de la ciudad se derrumbaron; la gente atacó la ciudad por todos lados y, por lo tanto, la tomó". Este versículo se refiere a la historia de la caída de Jericho, que fue conquistado por los israelitas después de que siguieron las instrucciones de Dios y circularon la ciudad durante siete días. La fe del pueblo de Israel en Dios los ayudó a superar los muros de la ciudad y conquistarla, mostrando que la confianza en Dios puede mover montañas.