Job, 33
2. Ya ves que he abierto mi boca, en mi paladar habla mi lengua.
2. Ya ves que he abierto mi boca, en mi paladar habla mi lengua.
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina