Oseas, 2

12. Y ahora descubriré su vergüenza a los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano.

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El Capítulo 2 del Libro de Oseas aborda la relación entre Dios e Israel, comparándola con un matrimonio en crisis. El Profeta Oseas habla sobre la infidelidad de Israel y el castigo que vendrá por eso. Luego habla sobre el arrepentimiento de Israel y la restauración de la relación con Dios. A continuación hay cinco versos relacionados con los temas cubiertos en Osea 2, en orden de proximidad al capítulo:

Isaías 54:5: "Porque tu creador es tu esposo; el Señor de los anfitriones es su nombre; y el santo de Israel es tu redentor; que se llama el Dios de toda la tierra". Este versículo habla sobre la relación de Dios con su pueblo, comparándola con un matrimonio. Esto se relaciona con el tema central de Oseas 2.

Jeremías 3:1: "Dicen, si un hombre se despide de su esposa, y ella lo deja y se reunirá con otro hombre, ¿lo hará más? , vuelve a mí, dice el Señor ". Este versículo también habla sobre el tema de la infidelidad y la restauración de la relación con Dios.

Ezequiel 16:38: "Y te juzgaré como los adultos y los que vierten sangre, y te darán la sangre de la indignación y el celo". Este versículo habla sobre el castigo que viene como resultado de la infidelidad. Oseas 2 también habla sobre el castigo que vendrá sobre Israel debido a su infidelidad.

Isaías 54:7-8: "Por un breve momento te dejé, pero con gran compasión te recolectaré; en un momento de indignación, escondí mi rostro por un momento; pero con amabilidad eterna simpatizaré contigo, dice el dice que lo dice que el Señor, tu redentor ". Este versículo habla sobre la restauración de la relación de Dios con su pueblo, incluso después de un período de castigo. Esto se relaciona con el tema de Osea 2 sobre el arrepentimiento de Israel y la restauración de su relación con Dios.

Isaías 62:5: "Porque como el joven se casa con la Virgen, sus hijos se casarán contigo; y cuando el novio se regocija en la novia, regocijándose contigo tu Dios". Este versículo habla sobre el amor de Dios por su pueblo y su alegría al verlos restaurados para él. Esto se relaciona con el tema de Osea 2 sobre la restauración de la relación de Dios con Israel.