Romanos, 14

16. Por tanto, no expongáis a la maledicencia vuestro privilegio.

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Romanos 14 trata sobre la libertad cristiana y la forma en que los cristianos deben lidiar con cuestiones de conciencia y divergencias de opinión. Pablo señala que aunque hay libertad en Cristo, debemos tener cuidado de no lastimar la conciencia de nuestro hermano más débil. Él enfatiza que debemos esforzarnos por vivir en paz y en armonía entre ellos, evitando juicios apresurados y respetando las diferencias de opinión. Según esto, aquí hay cinco versos relacionados con los temas abordados en Romanos 14, en orden de proximidad al capítulo:

1 Corintios 8:9: "Pero mira que esta libertad no es de ninguna manera escándalo para los débiles". Este versículo destaca la importancia de considerar el impacto de nuestras acciones en nuestros hermanos más débiles en la fe. Él enfatiza que nuestra libertad en Cristo debe ejercerse con responsabilidad y amor por los demás.

Colosenses 2:16: "Por lo tanto, nadie te juzga por comer, beber, o por días de fiesta, o luna nueva o sábados". Este versículo destaca la idea de que si la observancia de ciertas costumbres no debería ser una fuente de juicio entre los cristianos. Él enfatiza que nuestra unidad en Cristo debe ser más importante que las diferencias de opinión en temas secundarios.

1 Tesalonicenses 5:13: "Y estimélos mucho enamorados, debido a su trabajo. Tenden la paz entre ustedes". Este versículo destaca la importancia de valorar y respetar a nuestros líderes espirituales y buscar la paz y la armonía entre los hermanos. Él enfatiza que debemos esforzarnos por vivir en paz el uno con el otro y honrar a quienes trabajan por nuestro bien espiritual.

Gálatas 5:13: "Para ustedes, hermanos, han sido llamados a la libertad. No usan la libertad para darle la carne, sino que se sirven por el amor". Este versículo nuevamente destaca la idea de que nuestra libertad en Cristo debe ejercerse con responsabilidad y amor por los demás. Él enfatiza que debemos usar nuestra libertad para servirnos mutuamente, no para satisfacer nuestros propios deseos egoístas.

Filipenses 2:3-4: "No haces nada por lucha o jactando, pero por humildad; cada uno considera a los demás superiores a sí mismo. No prestes atención a lo que es propiamente suyo, pero cada uno también por lo que es otros. " Este versículo destaca la importancia de la humildad y el servicio entre los cristianos. Él enfatiza que debemos poner a otros por encima de nosotros mismos y servirnos con amor, incluso cuando implica abdicar nuestras propias preferencias.