25. Desencadenaré mis celos contra ti y te tratarán con furor; te arrancarán la nariz y las orejas, y lo que quede de tu descendencia caerá a espada. Se llevarán a tus hijos y a tus hijas, y lo que en ti quede será pasto del fuego.





“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina