5. Rebeca había estado escuchando lo que Isaac decía a su hijo Esaú; y, tan pronto como éste se fue al campo en busca de caza para su padre,





“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina