7. Pero no todos saben esto; pues algunos, acostumbrados hasta ahora a adorar a los ídolos, comen las carnes pensando que están consagradas a los ídolos, y su conciencia, que no está bien formada, les hace sentirse culpables.





“Não se fixe voluntariamente naquilo que o inimigo da alma lhe apresenta.” São Padre Pio de Pietrelcina