4. Él se internó en el desierto una jornada de camino y fue a sentarse bajo una retama, deseándose la muerte y diciendo: "¡Ya basta, oh Señor! Quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres".





“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina