12. Gracias a su humillación, la ira del Señor se apartó del rey sin causarle una aniquilación total; más aún, las cosas mejoraron en Judá.





“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina