2. Con todas mis fuerzas he preparado para la Casa de Dios el oro para los objetos de oro, la plata para los objetos de plata, el bronce para los objetos de bronce, el hierro para los de hierro y la madera para los de madera; piedras de ónice y de engaste, piedras brillantes y de varios colores, toda clase de piedras preciosas y piedras de alabastro en abundancia.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina