14. Al llegar la carreta al campo de Josué, de Bet-Semes, se detuvo; había allí una gran piedra. Astillaron la madera de la carreta y sacrificaron encima las vacas, como víctimas quemadas en honor a Yavé.





“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina