2 Samuel, 24
23. Todo se lo doy al rey. ¡Ojalá Yavé, tu Dios, te escuche!» El rey, sin embargo, le contestó: «Gracias, Areuna.
23. Todo se lo doy al rey. ¡Ojalá Yavé, tu Dios, te escuche!» El rey, sin embargo, le contestó: «Gracias, Areuna.
“Os corações fortes e generosos não se lamentam, a não ser por grandes motivos e,ainda assim,não permitem que tais motivos penetrem fundo no seu íntimo.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina