Ezequiel, 16
25. en todas las entradas de camino levantaste un montículo. Profanaste tu belleza, ofreciste tu cuerpo a cuantos pasaban y te revolcaste en la perdición.
25. en todas las entradas de camino levantaste un montículo. Profanaste tu belleza, ofreciste tu cuerpo a cuantos pasaban y te revolcaste en la perdición.
“Enquanto estivermos vivos sempre seremos tentados. A vida é uma contínua luta. Se às vezes há uma trégua é para respirarmos um pouco.” São Padre Pio de Pietrelcina