18. Balaam respondió a los servidores de Balac: "Aunque Balac me diera su casa llena de plata y de oro, no desobedecería la orden de Yavé, mi Dios, no importa que fuera para una cosa pequeña o grande.





“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina