Fondare 955 Risultati per: Promesas de Jerusalén

  • Pero se lo avisaron a Salomón: «Semeí ha ido de Jerusalén a Gat y ha vuelto.» (1 Reyes 2, 41)

  • Salomón emparentó con Faraón, rey de Egipto. Tomó a su hija por esposa y la instaló en la Ciudad de David hasta que terminara de construir su casa, la Casa de Yavé y la muralla en torno a Jerusalén. (1 Reyes 3, 1)

  • Al despertar Salomón, se dio cuenta de que era un sueño. Volvió entonces a Jerusalén y se puso delante del Arca de la Alianza del Señor. Ofreció víctimas consumidas por el fuego y también sacrificios de comunión, dando un banquete a todos sus servidores. (1 Reyes 3, 15)

  • Salomón congregó en Jerusalén a todos los jefes de Israel, a los jefes de sus tribus y a los príncipes de sus familias, para subir el Arca de la Alianza de Yavé desde la ciudad de David llamada Sión. (1 Reyes 8, 1)

  • Desde el día que saqué de Egipto a mi pueblo, Israel, no había elegido ninguna ciudad entre todas las tribus de Israel, para edificar una casa en la que esté mi Nombre. Hoy, sin embargo, he elegido a Jerusalén para que esté ahí mi Nombre, lo mismo que he elegido a David para que esté al frente de mi pueblo. (1 Reyes 8, 16)

  • Tú habías anunciado este día a mi padre David, tu servidor. Hoy vemos que has sido fiel a tus palabras y has cumplido tus promesas. (1 Reyes 8, 24)

  • «Bendito sea Yavé, que ha dado paz y reposo a su pueblo, Israel, según se lo había prometido; no ha faltado a ninguna de las promesas que hizo por boca de Moisés, su siervo. (1 Reyes 8, 56)

  • Ahora viene lo referente al trabajo obligatorio que el rey estableció para construir la Casa de Yavé, el palacio real, el terraplén, la muralla de Jerusalén, Jasor, Meguido y Gazer, (1 Reyes 9, 15)

  • todas las ciudades de aprovisionamiento que tenía Salomón, las ciudades de los carros de guerra y las de las tropas de a caballo, y todo cuanto Salomón quiso edificar en Jerusalén, en el Líbano y en toda la tierra de su dominio. (1 Reyes 9, 19)

  • Llegó, pues, a Jerusalén con un gran número de camellos cargados de perfumes y de gran cantidad de oro y joyas. Cuando estuvo en la presencia de Salomón, ella le expuso todas sus dudas, (1 Reyes 10, 2)

  • Salomón reunió carros y caballería, llegando a tener 1.400 carros y 12.000 caballos, y los distribuyó entre las ciudades de los carros y Jerusalén, cerca de él. (1 Reyes 10, 26)

  • Salomón hizo que la plata fuera tan abundante en Jerusalén como las piedras, y los cedros tan numerosos como los sicómoros en la llanura. (1 Reyes 10, 27)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina