Fondare 1353 Risultati per: guerra contra los santos

  • Lo que sigue vale para la persona que se encuentra culpable porque podía testificar respecto de algún crimen del que fue testigo ocular o del que supo y, sin embargo, al oír las palabras de la maldición contra quien no denunciara no quiso denunciar al culpable. (Levítico 5, 1)

  • Porque yo soy Yavé, Dios de ustedes; santifíquense y sean santos, pues yo soy Santo. No se hagan impuros con ninguno de esos reptiles que se arrastran por el suelo, (Levítico 11, 44)

  • pues yo soy Yavé, el que los ha sacado del país de Egipto para ser su Dios. Sean, pues, santos porque yo soy Santo. (Levítico 11, 45)

  • «Habla a toda la comunidad de los hijos de Israel y diles: Sean santos, porque yo, Yavé, Dios de ustedes, soy Santo. (Levítico 19, 2)

  • No te vengarás ni guardarás rencor contra tus paisanos, sino que más bien amarás a tu prójimo como a ti mismo, pues Yo soy Yavé. (Levítico 19, 18)

  • Yo mismo volveré mi rostro contra ese hombre y lo eliminaré de su pueblo. Pues al sacrificar su descendencia para Moloc, contaminó mi Santuario y profanó mi santo Nombre. (Levítico 20, 3)

  • volveré yo mi rostro contra ese hombre y contra toda su familia y borraré de en medio de su pueblo a él y a todos los que se venden como él a Moloc. (Levítico 20, 5)

  • Si alguno se dirige a los que consultan a los espíritus, o a los brujos para prostituirse con ellos, volveré mi rostro contra él y lo eliminaré de su pueblo. (Levítico 20, 6)

  • Santifíquense, pues, y sean santos, porque yo soy Yavé, el Dios de ustedes. (Levítico 20, 7)

  • Guarden mis preceptos y practíquenlos: ¡yo soy Yavé, y a ustedes les hago santos! (Levítico 20, 8)

  • Sean santos para mí, porque yo soy Santo, yo Yavé, que los he separado de los demás pueblos para que sean míos. (Levítico 20, 26)

  • Serán santos para su Dios y no profanarán su Nombre porque son ellos los que ofrecen los sacrificios por el fuego, alimento de su Dios; por esto han de ser santos. (Levítico 21, 6)


“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina