Fondare 46 Risultati per: marca de la bestia

  • Cuando ustedes traen para sacrificarla una bestia ciega, o cuando presentan una coja o enferma, ¿creen que actúan bien? Llévasela al gobernador a ver si queda contento o si te recibe bien, dice Yavé de los ejércitos. (Malaquías 1, 8)

  • Maldito sea el tramposo que, teniendo en su rebaño un toro, luego de prometérmelo, me sacrifica una bestia raquítica. Porque el Rey grande soy yo, y mi Nombre será respetado en todas las naciones, dice Yavé de los Ejércitos. (Malaquías 1, 14)

  • Los otros discípulos le dijeron: «Hemos visto al Señor.» Pero él contestó: «Hasta que no vea la marca de los clavos en sus manos, no meta mis dedos en el agujero de los clavos y no introduzca mi mano en la herida de su costado, no creeré.» (Evangelio según San Juan 20, 25)

  • Por estar circuncidados no es que observan la Ley; tan sólo les interesa la marca en el cuerpo, y se sentirían orgullosos de que ustedes la tuvieran. (Carta a los Gálatas 6, 13)

  • Cuando hayan concluido su misión, la bestia que sube del abismo les hará la guerra, los vencerá y los matará. (Apocalipsis 11, 7)

  • Entonces vi una bestia que sube del mar; tiene siete cabezas y diez cuernos, con diez coronas en los cuernos, y en las cabezas un título que ofende a Dios. (Apocalipsis 13, 1)

  • La bestia que vi se parecía a un leopardo, aunque sus patas eran como las de un oso y su boca como de un león. El dragón le entregó su poder y su trono con un imperio inmenso. (Apocalipsis 13, 2)

  • Una de sus cabezas parecía herida de muerte, pero su llaga mortal se le curó. Entonces toda la tierra se maravilló, siguiendo a la bestia. (Apocalipsis 13, 3)

  • Se postraron ante el dragón que había entregado el poderío a la bestia, y se postraron también ante la bestia, diciendo: «¿Quién hay como la bestia? ¿Quién puede competir con ella?» (Apocalipsis 13, 4)

  • Vi luego otra bestia que surgía de la tierra y tenía dos cuernos de cordero, pero hablaba como un dragón. (Apocalipsis 13, 11)

  • Esta segunda bestia está al servicio de la primera, y dispone de todo su poder y autoridad; hace que la tierra y todos sus habitantes adoren a la primera bestia, cuya herida mortal ha sido curada. (Apocalipsis 13, 12)

  • Por medio de estos prodigios que le ha sido concedido obrar al servicio de la bestia, engaña a los habitantes de la tierra y los persuade a que hagan una estatua en honor de la bestia que, después de ser herida por la espada, se recuperó. (Apocalipsis 13, 14)


O maldito “eu” o mantém apegado à Terra e o impede de voar para Jesus. São Padre Pio de Pietrelcina