Fondare 357 Risultati per: ornamentos del templo

  • ¿No han leído en la Ley que los sacerdotes en el Templo no observan el descanso, y no hay culpa en eso? (Evangelio según San Mateo 12, 5)

  • Yo se lo digo: ustedes tienen aquí algo más que el Templo. (Evangelio según San Mateo 12, 6)

  • En cambio, según ustedes, es correcto decir a su padre o a su madre: Lo que podías esperar de mí, ya lo tengo reservado para el Templo. (Evangelio según San Mateo 15, 5)

  • Al volver a Cafarnaún, se acercaron a Pedro los que cobran el impuesto para el Templo. Le preguntaron: «El maestro de ustedes, ¿no paga el impuesto?» (Evangelio según San Mateo 17, 24)

  • Jesús entró en el Templo y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el Templo. Derribó las mesas de los que cambiaban monedas y los puestos de los vendedores de palomas. Les dijo: (Evangelio según San Mateo 21, 12)

  • También en el Templo se le acercaron algunos ciegos y cojos, y Jesús los sanó. (Evangelio según San Mateo 21, 14)

  • Los sacerdotes principales y los maestros de la Ley vieron las cosas tan asombrosas que Jesús acababa de hacer y a los niños que clamaban en el Templo: «¡Hosanna al hijo de David!». Estaban furiosos (Evangelio según San Mateo 21, 15)

  • Jesús había entrado al Templo y estaba enseñando, cuando los sumos sacerdotes y las autoridades judías fueron a su encuentro para preguntarle: «¿Con qué derecho haces todas estas cosas? ¿Quién te lo ha encargado?» (Evangelio según San Mateo 21, 23)

  • ¡Ay de ustedes, que son guías ciegos! Ustedes dicen: Jurar por el Templo no obliga, pero jurar por el tesoro del Templo, sí. (Evangelio según San Mateo 23, 16)

  • ¡Torpes y ciegos! ¿Qué vale más, el oro mismo, o el Templo que hace del oro una cosa sagrada? (Evangelio según San Mateo 23, 17)

  • El que jura por el Templo, jura por él y por Dios que habita en el Templo. (Evangelio según San Mateo 23, 21)

  • Al final recaerá sobre ustedes toda la sangre inocente que ha sido derramada sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, al que ustedes mataron ante el altar, dentro del Templo. (Evangelio según San Mateo 23, 35)


"Tente percorrer com toda a simplicidade o caminho de Nosso Senhor e não se aflija inutilmente.” São Padre Pio de Pietrelcina